Pantelhó, Chis.- Más de tres mil habitantes de las 86 comunidades de Pantelhó tomaron la alcaldía, incendiaron casas y vehículos, saquearon tiendas e hicieron replegar varias cuadras a elementos del Ejército, la Guardia Nacional y policías estatales que mantenían el control del pueblo.

Los pobladores de los 18 barrios de la cabecera municipal de Pantelhó celebraron la mañana del lunes 26 una asamblea donde estuvieron presentes funcionarios de la Fiscalía General del Estado (FGE), y también algunos elementos de la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Los pobladores de estos 18 barrios encabezados por el Comisariado Ejidal pidieron a las autoridades realizar algunos cateos donde al parecer consideran que hay armas de fuego, explosivos y personas que han regresado al pueblo y están vinculados a los Herrera.

Los funcionarios de la FGE respondieron que no podían hacerlo sin tener la orden judicial de un juez, pero pidieron que se esperaran 24 horas, que señalaran las casas a catear, incluso indicaron que dejarían guardias de la Sedena y la GN para que nadie entrara o sacara nada de ellas, y que en 24 horas regresaran con la orden judicial, pues de hacerlo sin ello se meterían en problemas.

Sin embargo, los pobladores, molestos, algunos encapuchados y con machetes, fueron a catear varias casas, algunas de ellas fueron quemadas y se dio a conocer que al menos 14 personas fueron retenidas.

Entre los detenidos se confirmó que están Filiberto Aguilar Hidalgo y Filiberto Aguilar Ballinas, padre e hijo. Además de Delmar Gallegos Alfaron, quien es el presidente del comité directivo municipal del PRD en Pantelhó.

Algunos familiares de los retenidos señalaron que entre los pobladores están infiltrados miembros del grupo de las Autodefensas de El Machete, y que temen que los 14 detenidos sean llevados a San José Buenavista Tercero, bastión de ese grupo armado.

Tras los cateos de la población civil, la FGE, la GN y la Sedena se replegaron a la entrada del pueblo para evitar un choque con la población encolerizada, pero su movilización causó temor y pánico entre otros pobladores.

Habitantes exigen justicia

La comunidad amaneció como una zona de guerra y en las banquetas de su calle principal descansan hombres encapuchados armados con palos y machetes; se observan tiraderos de basura y restos de productos saqueados de las tiendas.

“ Lo que estamos exigiendo es que se haga justicia y que la Fiscalía detenga a la gente mala”, afirmó uno de los dirigentes de las autodefensas El Machete, quien aclaró que ese grupo no participó en la toma del pueblo sino que lo hicieron las comunidades pero que “nosotros estuvimos apoyándolos pero sin armas porque esas se quedaron en el campamento”.

Agregó que la alcaldía gobernada por el PRD permanecerá tomada hasta que las autoridades federales y estatales hagan justicia. Los integrantes del ayuntamiento no se han aparecido en el pueblo desde el 7 de julio, cuando los autodefensas de El Machete irrumpieron en la cabecera municipal.

Con información de Proceso y La Jornada