Hace casi 9 años inicié un proyecto cultural-histórico referente a mi ciudad natal, Saltillo, en el cual platico sobre anécdotas cotidianas, de hechos o sucesos históricos que acontecieron en una hermosa ciudad que por casi tres siglos eran dos poblaciones distintas; en otras ocasiones hago mención de lo más importante que tenemos en esta tierra, de sus personajes algunos muy conocidos, otros no tan famosos, algunos nativos de este rincón del cielo y otros más, hombres y mujeres que han llegado para convertirse en Saltillenses (le solicito al editor mantenga la “S” mayúscula, pues Saltillense es el único gentilicio que debe ser escrito en mayúscula), un ejemplo de esto es mi amigo y tocayo Francisco Juaristi, quien me ha permitido a través de Tele Saltillo ampliar el proyecto histórico del cual también él es partícipe.

Todo inició con la idea de dar algún comentario económico, pero como economista sabía que nadie me leería o escucharía, y pasó por mi mente aquel comentario de la radio, que afirmaba, según Aristóteles, a Saltillo solo le faltaba ser puerto marítimo para cumplir los tres requisitos de la ciudad perfecta, sigo buscando cuáles son los otros dos, por lo que mejor decidí platicar de la historia de esta hermosa ciudad que me vio nacer.

Las Cápsulas Saraperas iniciaron en la radio, después en el periódico, simultáneamente con las famosas redes sociales, al llegar la transmisión de Tele Saltillo, muy amablemente y con gran interés Pancho Juaristi me abrió las puertas de su canal.

Hace unos días este proyecto, gracias al apoyo de empresarios Saltillenses, creció por medio de la publicación, que tendrá una periodicidad mensual, Yo Soy de Saltillo, La Revista, mediante la cual daremos a conocer 10 historias de Saltillo y de sus Saltillenses, imprimiendo mil ejemplares, distribuyéndose en distintos negocios de la localidad y de manera digital por medio de las redes sociales.

Es un proyecto en el cual, sin la participación de Saltillenses, nativo o adoptivos, no podría realizarse, es un proyecto que busca y logrará llevar la historia de Saltillo a cada rincón de Saltillo, que tiene la firme intención de mantener vivas nuestras tradiciones, y que no olvidemos a los Saltillenses, que gracias a su amor, pasión y trabajo han construido una ciudad de la cual solo intento mostrar mi amor por ella describiendo su andar.

Gracias tocayo por todo el apoyo que me has brindado en este gran proyecto Saltillense.