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“Que crimen no quede impune”: Familia de Elisa Loyo

  Por Redacción

Publicado el martes, 30 de diciembre del 2008 a las 16:21


Familiares de Elisa Loyo, la joven saltillense hallada muerta en un hotel de Pampanga, provincia de Filipinas

Saltillo, Coah.- Familiares de Elisa Loyo, la joven saltillense hallada muerta en un hotel de Pampanga, provincia de Filipinas, exigieron –en Saltillo y en Ontario– que la muerte de la joven chef no quede impune.

En Canadá, los padres de Elisa Loyo Gutiérrez insistieron en que la joven no se suicidó, y resaltaron las enormes irregularidades que han detectado en los partes desprendidos de la investigación que realizan las autoridades filipinas.

Rosa Cabello, madre de la víctima, aseguró al “Thunder Bay Source” que su hija estaba amenazada de muerte, y que había enfrentado muchos problemas luego de que denunció a compañeros de trabajo que estaban robando carne de la cocina y que finalmente fueron despedidos.

LA ULTIMA LLAMADA

Por su parte, Dan Somerfield, padrastro de la joven, también habló para los medios canadienses acerca las inconsistencias que han ido surgiendo en torno a la muerte de la saltillense desde que se ventiló el caso.

Somerfield dijo a “The Canadian Press” que la última comunicación con la joven fue el 19 de diciembre.

“Sonaba algo triste durante la llamada”, por los conflictos que habían surgido luego de que denunció a sus compañeros, dijo el padrastro, y aseguró que Elisa anhelaba regresar a su hogar; de hecho, la esperaban en Canadá a principios de enero de 2009.

En tanto, aquí en Saltillo su padre biológico, Ignacio Loyo, así como su tío Ariel y su prima Daniela Gutiérrez, coinciden en que su muerte no se debió a un suicidio, y se unieron a la exigencia de que esclarezcan las causas de su muerte.

SI LE HARAN OTRA AUTOPSIA

Ariel mencionó también que por lo pronto el Buró Nacional de Investigación Filipino, a petición de ambas embajadas, “aceptó hacerle la autopsia” al cadáver, que por lo pronto deberá permanecer en el citado país asiático.

En tanto, un sinnúmero de amigos, tanto de Elisa como de sus hermanas Sofía y Lucía, en varias partes del mundo, están “subiendo” comentarios y aportando datos acerca de la personalidad de la joven chef, que invariablemente coinciden en que Elisa no tenía el perfil de una suicida, e incluso aseguran que estaba en contra de una medida tan drástica.

“ES IMPOSIBLE QUE SE HAYA SUICIDADO”
The Canadian Press

El padrastro de la mexico-canadiense de 25 años que fue encontrada muerta en un hotel de las Filipinas, donde trabajaba como chef, Dan Somerfield, ha mostrado sus dudas sobre la conclusión oficial de que su muerte fue suicidio; aunque las autoridades alimentan esta versión.

Elisa Loyo Gutiérrez, de Thunder Bay, Ontario, fue encontrada colgada de un cable eléctrico atado al techo de la oficina del chef en el Fontana Leisure Park en la provincia de Pampanga, aseguró el jefe de la policía local, René Aspe.

Dos trabajadores del hotel encontraron el cuerpo luego de seguir el rastro de un olor hacia la oficina, que no había sido usada en meses.

“Hay muchas irregularidades en la investigación”, dijo Rosa Cabello, su madre, al referirse a los reportes de las indagatorias acerca de la muerte de su hija.
“Cada vez más, con la historia la familia y amigos estamos sospechando”, dijo.

La familia habló por última vez con ella el pasado 19 de diciembre. Elisa les comentó que estaría en casa a principios de enero, o a más tardar en mayo, a pesar de que tenía contrato hasta septiembre. “Se enfrentó a muchos problemas allá y sonaba algo triste durante la llamada”, aseguró el padrastro.

En octubre fueron hechas amenazas a su vida, luego de que expusiera a varios empleados que estaban robando carne de la cocina y que posteriormente fueron despedidos. “Tuvo amenazas de muerte; no era muy popular allá”, dijo Somerfield.

“El cuerpo de Elisa tenía cortaduras en ambas muñecas y dos puñaladas en el cuello, y se determinó que tenía varios días de haber fallecido”, comentó el jefe de policía; “no había ninguna nota suicida”.

Dos cuchillos con marcas de sangre fueron encontrados en el cuarto, mientras que muchos otros cuchillos de cocina fueron hallados en la mesa. “Elisa pudo haber intentado apuñalarse primero; pero prefirió colgarse cuando notó que era muy doloroso”, asegura Aspe.

ELISA NO TENIA PERFIL DE SUICIDA

La familia no cree que ella haya podido cometer suicidio. “Era una jovencita carismática y maravillosa, llena de vida”, dice su padrastro, “queremos más información y de ninguna manera el suicidio es una posibilidad… está definitivamente lejos de su personalidad, no tenía antecedentes de esto”.

Elisa Gutiérrez se mudó de México a Canadá en 2001 y tenía la doble nacionalidad.

Somerfield se entrevistó con oficiales canadienses en Ottawa, quienes le aseguraron que el embajador en Filipinas había hablado con el director de la policía y presionado por una autopsia completa que debía realizarse en Manila.

Una vez que el reporte inicial de la policía esté terminado, ambos –Canadá y México– trabajarán juntos para poder canalizar el caso a una autoridad policiaca superior similar a la Real Policía Montada de Canadá (O la PGR aquí).

Personal del hotel notificó a los padres de Elisa que no había sido vista desde el 23 de diciembre, cuando salió de trabajar. Aspe les dijo que un guardia de seguridad le había comentado a la policía que vieron a Elisa por última vez caminando hacia la oficina sola la mañana del 23 de diciembre.

“Toda la gente a la que entrevistamos en el Fontana notó que una semana antes del incidente ella no había estado comiendo ni durmiendo, tal vez porque estaba deprimida”, dijo Aspe. “Hubo incluso un incidente donde un colaborador la vio afilando un cuchillo en el baño antes del atardecer”.

El superintendente Nicanor Targa, jefe de seguridad de la antigua Base Aérea Clark, donde se localiza el complejo hotelero, comentó vía telefónica que una prueba inicial recabada por su oficina mostraba que Elisa había tenido un altercado con un compañero extranjero antes de ser encontrada muerta. Sin embargo, el caso fue turnado luego a la oficina de Aspe.

“ERA UNA CHAVA MUY DEDICADA”, DICE AMIGA
Por Paola Praga

“Elisa era una chava muy dedicada a la escuela, siempre cumplía con las tareas y hacía excelentes trabajos cuando nos los encargaban de investigación o esas materias”, expresó Glenda Morales, ex compañera de Elisa Loyo durante la preparatoria, cursada en el Ateneo Fuente.

La joven contadora, quien concluyó sus estudios en la Facultad de Ciencias de la Administración de la UAdeC, mencionó que Loyo siempre fue una alumna destacada y obtuvo los primeros lugares de aprovechamiento durante el bachillerato.

DE LAS MAS ESTUDIOSAS

“Recuerdo que era muy participativa en las clases y se juntaba con el grupito de las más estudiosas del salón, y yo creo que de todo el Ateneo en ese entonces; pero era una chava muy buena onda”.

La ex alumna expresó que Loyo siempre se distinguió por ser una joven alegre y positiva, por lo que no cree que Elisa, a sus 25 años, hubiera tomado la decisión de quitarse la vida.

Glenda Morales incluso platica que en cierta etapa del bachillerato, en la que ella atravesaba por problemas personales, Elisa le dio algunos consejos de que siguiera adelante y le siguiera echado ganas a la vida.

“La verdad yo no creo que ella se suicidara, además que era una chava que se veía que no tenía problemas; siempre andaba con una sonrisa en la cara, por eso lo dudo”, finalizó.

A sus 25 años, Elisa ya había alcanzado grandes logros en su vida personal y laboral. Nació en Monterrey; pero desde pequeña vivió en Saltillo.

Los amigos de Elisa coincidieron en la alegría que distinguió siempre a la joven, quien optó por estudiar cocina internacional en el Culinary Confederation College en Thunder Bay, provincia de Ontario en Canadá, país en el que vivía desde el 2001.

Elisa cursó la preparatoria en el Ateneo Fuente de 1999 a 2001.

“BORRARON LLAMADAS DE SU CELULAR”
Por Claudia O. Morán

En la red, una nueva prueba del crimen cometido contra Elisa Loyo surgió a través del blog personal de Rosa Jiménez Cano, una amiga de Sofía Loyo, hermana de Elisa. En él, Rosa comunica a su red social las circunstancias de la muerte de la hermana de su amiga, asegurando que es el “peor momento de su vida”.

“Tras varios días sin saber de su hermana –relata en el blog– se plantaron en Filipinas desde París. Desde el primer momento la información ha sido escasa.
Elisa, la fallecida, tenía doble nacionalidad. Desde Canadá no les han dado ningún tipo de ayuda o facilidades hasta el momento. Desde México muy poquito, hasta que comenzó a salir en la prensa lo acontecido.

“Sofía denuncia que no se ha investigado nada, que les han hecho creer que su hermana se suicidó cuando tiene cortes en las muñecas, estómago y diferentes golpes. Las versiones que les dan son encontradas. Por un lado se asegura que la encontraron en una despensa y otros dicen que en un despacho.

“Sofía nos ha explicado que borraron las llamadas entrantes y salientes de su móvil y que no se había tratado de esclarecer nada en su propia habitación. La policía ni se ha molestado en abrir investigación y que ella está tratando de aportar todo lo que considera que puede ser una prueba.

“En conversaciones con su madre, Elisa había denunciado la precaria situación en que vivían los trabajadores de su cocina; muchos de ellos chinos en condiciones de casi esclavitud. También había dado cuenta de las irregularidades de contratación de su empresa, radicada en Hong Kong, y de robos sufridos en la cocina.

“Sofía no se fía nada de esta compañía, dedicada a los grandes resorts. Desde el principio, sin que anunciasen su llegada, les esperaron en el aeropuerto y les invitaban a quedarse allí. No aceptaron y comenzaron las dificultades. Tras no creerse la versión del ‘suicidio’ están haciendo todo lo que está en su mano y un poco más para que se haga una segunda autopsia, o una que no sea sólo superficial.

“Sé que no suelo hacer este tipo de cosas en el blog. No son temas habituales; pero es mi blog personal y Sofía bien lo vale. El esclarecer los hechos, también. Por eso, abuso de vuestra confianza y os pido que tratéis de dar la mayor difusión posible a estos hechos para crear cierta presión, para que al menos algo se investigue, para que Sofía pueda estar tranquila después de tanta tensión y llorar a su hermana como merece.

Admiro la entereza de la conversación que hemos tenido por teléfono y su capacidad de lucha”, finaliza Rosa Jiménez Cano en su blog, que hasta ayer llevaba 26 comentarios de apoyo.

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