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Culpa a Hacienda de faltante en la Narro

  Por Camelia Muñoz

Publicado el jueves, 27 de octubre del 2011 a las 14:00


Pide Jorge Galo aclare Eladio Cornejo destino de 22 mdp

Saltillo.- Los recursos que debió enviar la Secretaría de Hacienda a la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro no llegaron en su tiempo y otros simplemente nunca llegaron durante 2010, por ello hubo problemas para realizar las aportaciones al Fondo de Pensiones y cumplir con otros compromisos, dijo Jorge Galo Medina Torres, ex rector de la institución.

Sostuvo que 2010 fue difícil y se venía arrastrando una disminución de 25 millones de pesos en el presupuesto, en comparación con lo operado en 2009.

Tras la serie de acusaciones que han derivado en auditorías sobre el manejo de recursos en su administración al frente de la UAAAN, el ex rector sostuvo que no hay irregularidades porque sus cuentas públicas han sido aprobadas y nadie le ha requerido informes dentro de las auditorías que se llevan a cabo.

“Esto hace que se generen muchos problemas, porque el problema de las universidades es un problema financiero que significa que es de flujo de recursos, porque los recursos no llegan cuando los necesitas y tienes que aprovechar la bolsa global para ir tomando dinero y cubriendo lo que se va requiriendo”, manifestó.

Como ejemplo puso que en febrero se otorga el incremento salarial a los trabajadores administrativos y académicos de la UAAAN, que se pagó con el gasto corriente porque el recurso llegó hasta noviembre del año pasado, cuando él ya no estaba frente a la rectoría.

“Esos 22 millones que llegaron en noviembre se estuvieron pagando con partidas del gasto corriente. Si hubieran llegado a tiempo hubiéramos cumplido con los compromisos de pensiones, pero no llegaron y habría que pedirle información al actual rector a dónde fueron a parar esos 22 millones que llegaron”, manifestó.

Medina Torres dijo que lo mismo pasó con otros recursos que desde 2009 estaban autorizados, pero jamás los envió la Secretaría de Hacienda.

“Yo tengo los recibos que supuestamente se enviaron pero nunca llegaron a la universidad. Desde que terminé mi función administrativa dejé caminando las auditorías 2009 y 2010, ya se habían aprobado por el Consejo Universitario las de 2007 y 2008, las de dos años después están listas, firmé los estados financieros y el despacho que las hizo estaría enviando el informe para que se sometan a la Comisión Hacendaria para su dictamen, se envíen al contralor interno y se presenten en el Consejo Universitario. Y así estará claro todo”, sostuvo.

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