Nacional
Por El Universal
Publicado el lunes, 27 de abril del 2009 a las 16:57
México, DF.- La alerta epidemiológica por el brote de influenza porcina no impidió el flujo de visitantes extranjeros y nacionales a los destinos turísticos del país, pese a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) consideró que se trata de “una emergencia de salud pública de preocupación internacional”, y que podría convertirse en una pandemia.
Los destinos de playa de Acapulco, Guerrero; Cancún, Quintana Roo, y Los Cabos, Baja California Sur, reportaron un sustancial flujo de paseantes y el arribo y salida de viajeros del país continúa con normalidad.
La suspensión de clases por la emergencia en el Distrito Federal, el estado de México y San Luis Potosí fue aprovechada por las familias para hacer turismo y desplazarse de manera masiva a los más populares destinos de playa para enlazar el obligado descanso con el Día del Niño, del 30 de abril, y el feriado del Día del Trabajo.
En Acapulco inició la 34 edición del Tianguis Turístico y se disparó la ocupación hotelera hasta 89.5%, con las playas abarrotadas, y continuaban llegando autobuses y vehículos particulares de todo el país. De hecho, el sábado llegó un crucero con cientos de turistas extranjeros.
Sin embargo, el gobernador de Guerrero, Zeferino Torreblanca, confirmó el cierre por tres días de discotecas y bares en Acapulco e Ixtapa–Zihuatanejo, para prevenir posibles contagios.
En Cancún, la Riviera Maya, Isla Mujeres y Cozumel la ocupación hotelera llegó a 76.51%, aun cuando se trata de una “temporada baja”.
En Mazatlán, también en el Pacífico, se reportó la llegada masiva de paseantes aun cuando las autoridades consideraron “latente” el riesgo de influenza por concentrar visitantes de todo el país y de Estados Unidos, y en los balnearios de Los Cabos y La Paz, en Baja California Sur, la actividad turística transcurría con normalidad y sin que se hayan aplicado medidas especiales.
En Yucatán no se ha reportado ningún caso de influenza porcina y funcionarios de Fomento Turístico indicaron que esperan que la emergencia no afecte la llegada de cientos de turistas que en esta temporada visitan las playas y las zonas arqueológicas.
En San Luis Potosí, tras confirmarse un quinto fallecimiento por influenza se ordenó la suspensión de clases y la Arquidiócesis anunció cambios en la liturgia, como la de entregar las hostias de comunión en la mano y no directamente en la boca, además de que se suspendió el noveno Festival San Luis.
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