Saltillo, Coahuila.- Diseñadora industrial de profesión pero pintora por pasión, María Martínez

inauguró la noche del sábado Sentimientos, su primera exposición de pintura, en la Galería del Lago, espacio destinado al arte dentro de las paredes de Casa Alameda.

Con una formación que transcurrió en talleres de pintura y maestros particulares, Martínez creó 10 piezas en las cuales su objetivo es expresar lo femenino, a la mujer como ser sensible.

“En esta exposición quise demostrar lo que para mí es la mujer: individualidad, fuerza, libertad y belleza, estos conceptos que encerramos nosotras. También quería hablar o dar a entender qué es lo que nos hace únicas a las mujeres, quería resaltar que para mí la mujer ha sido súper importante, pero más que nada hoy en día, la mujer resalta en lo que se propone”, señaló Martínez.

MUJER Y ARTE

La pintora también comentó sobre la aceptación femenina de las mujeres dentro del mundo del arte, un ámbito dominado por los hombres, del cual ella cree que ha evolucionado a un espacio más equitativo.

“Creo que hoy en día las mujeres tenemos una mayor aceptación dentro del ámbito artístico, en el que hemos visto una evolución y una eliminación de los prejuicios que podrían haber.

“Hay mujeres muy importantes no sólo en el arte, sino en lo social, que han ayudado mucho, pero nosotras también queremos hacer eso desde el arte”, comentó la diseñadora.

Su obra busca una exploración sensorial desde el punto de vista femenino al mismo tiempo que la exploración de técnicas más lúdicas y libres, como si se tratara de una metáfora de la liberación.

“Comencé pintando con la técnica de los pasteles, ya que es algo que nunca había hecho; me pareció interesante explorar la figura femenina por medio de estos materiales, es lo que me interesaba explorar y expresar como artista en esos cuadros.

“El resto son mezclas de distintas técnicas que van desde acrílicos, óleos e incluso hay chapopote en ellas. Todas mantienen las mismas tonalidades con las que intento recrear mi idea de las mujeres, ya que representan la frescura y la fuerza de nosotras”, explicó la autora de las obras.

ABSTRACCIÓN

Para Martínez el arte abstracto es la técnica que más exige una reflexión por parte del espectador, lo cual crea un vínculo intelectual entre ambas partes: creador y público, pero además es la idea del juego con los materiales lo que la atrae a éste.

“En los lienzos prefiero el abstracto porque me gusta jugar con las formas o los escurrimientos de las pinturas, me gusta que no sea algo definido sino que sea una pintura juguetona y libre, una expresión de lo que sienta en el momento. Además al no ser una técnica controlada, es más fuerte y cercano a lo que el pintor siente.

Esta falta de dirección o control es algo que se muestra ante el espectador, quien buscará el significado en la obra y el que piense sobre qué quiere decir el artista en ella, ya es un diálogo entre el pintor y el espectador.

A lo largo de 10 piezas de mediano formato y cuyo cromatismo se mueve en colores suaves y tranquilos, María Martínez llevó al público que la acompañó a un viaje pictórico.

La centenaria Casa Alameda fue el lugar propicio para que la artista explorara las emociones personales que constituyen el objetivo de la obra: la representación de la mujer como una parte importante de la vida.

Con cuatro piezas en pastel, en donde la figura de la mujer es el principal atractivo, el resto de las obras se alejan de esta representación figurativa de la realidad para traspasar al mundo de la fantasía y lo abstracto, pues el resto ofrece pinturas que se mueven y reflejan ideas de la pintora.