Pakistán.- Pakistán comenzó a construir una valla en su frontera con Afganistán en el marco de la lucha contra los grupos extremistas presentes en la región.

Las Fuerzas Armadas de Pakistán organizaron el miércoles una visita para un grupo de periodistas extranjeros a la frontera, con el objetivo de presentar los avances desde marzo, cuando se anunció la construcción de la valla.

La valla, de unos tres metros de alto, culmina con alambras de púas. De momento, cubre varios segmentos sobre unos 43 kilómetros en las zonas tribales montañosas del Waziristán del Norte y Waziristán del Sur.

El objetivo de su construcción es impedir que grupos armados como los talibán o Al Qaida crucen libremente entre los dos países.

La construcción de la valla representa “un cambio histórico” en materia de control de la frontera, declaró un oficial en el fuerte Hamza de Angoor Adda, en Waziristán del Sur.

“Para diciembre de 2018, no quedará ni una pulgada de la frontera internacional sin vigilancia”, aseguró. “Cuando hayamos terminado, si Dios quiere, estaremos seguros de algo: nadie podrá cruzar”, agregó.

Además de los militares desplegados en las colinas para vigilar el otro lado de la frontera, las Fuerzas Armadas utilizan cámaras que enfocan la valla, que permanece iluminada durante la noche.

Los dos países comparten una frontera de 2 mil 400 kilómetros llamada línea Durand, trazada por los británicos en 1896, delimitación que contesta Kabul.

Afganistán y Pakistán se acusan mutuamente de albergar santuarios de rebeldes en sus territorios, desde donde se planifican los atentados.

La población pashtún local le otorgaba tradicionalmente poca importancia a esta frontera.

Muchas localidades se desarrollaron a caballo de esta línea, a tal punto que algunas viviendas tienen una puerta en Afganistán y otra en Pakistán.

Los controles fronterizos eran casi inexistentes, hasta que Pakistán decidió reforzarlos recientemente.