Saltillo, Coah.- Gerardo Rodríguez Canales es Geroca, artista saltillense reconocido y respetado en el noreste del país. También es como un ser mítico, ya que no asiste a sus exposiciones ni concede entrevistas, verlo es el equivalente a capturar un unicornio o ver renacer al fénix de sus cenizas.

A lo largo de cuatro décadas, Geroca se ha dedicado a pintar sin descanso. Sus personajes son seres grotescos que hipnotizan al espectador y lo llevan a un universo oscuro de violencia y pasiones. Zócalo habló con Sergio Castillo, promotor cultural y amigo personal del pintor, quien, en la Taberna El Cerdo de Babel ofrece una retrospectiva de la obra del artista.

UNA VISTA AL PASADO

El Cerdo de Babel, bar de corte bohemio y artístico, de un leve aire intelectual y de cómodos interiores, tiene 14 años en pie, 10 de ellos dedicados a ser una galería para los talentos, tanto emergentes como consolidados.

“Este 2017 se cumplen 10 años de la primera exposición de Geroca en el Cerdo, lo que hicimos fue celebrar este aniversario con una exposición que no fuera la que él presenta a finales de año. Geroca guarda todas las obras que no vende, y yo tuve acceso a la bodega donde las tiene, gracias a esto me di cuenta que tenía todo este acervo. Le comenté que sería uena idea tener una retrospectiva de su trayectoria con ese material”, comentó Castillo.

La retrospectiva se llama Geroca 1978-2006, aún así, la pieza más antigua de las 55 que conforman la exposición es de 1967, un bodegón de naturaleza muerta. ¿Cuáles fueron los parámetros bajo los que se hizo la curaduría de una obra tan extensa como la del artista?

“Todo lo que saqué de su casa está montado aquí, excepto algunos cuadernos de trabajo los cuales no pudimos colgar de alguna manera debido a la curaduría que diseñamos. La base fue elegir obras que nunca se hubieran exhibido en el Cerdo y, además, elegir técnicas que haya utilizado a lo largo de su trayectoria, pero que en los últimos años no lo haya hecho. Lo que queremos es dar a conocer una nueva perspectiva de Geroca como artista plástico”, agregó el promotor cultural.

LOS BARRIOS BAJOS

Las pinturas de Geroca muestran seres grotescos, desproporcionados, cuyas bocas enormes enseñan los dientes. Personajes que forman parte de la vida verdadera de las ciudades, escenas cotidianas del noreste de México, escenas cotidianas salidas de la imaginación del artista.

“Los temas principales son los barrios bajos y sórdidos de las ciudades de Saltillo y Monterrey. Sitios que son marginales dentro de las zonas centrales de estas ciudades, siguen siendo marginales.

“Siento que él tiene un conflicto que origina sus temas. Pues él es miembro de una familia antigua de Saltillo. Además de que él viene de una generación de un Saltillo cerrado y conservador de los 50. Él rechaza esta vida ‘nice’ debido a su doble moral y decide vivir y romper con la sociedad de una manera especial en la pintura”, comentó el socio de El Cerdo de Babel.

Estas escenas sórdidas en donde se mezclan mendigos, vaqueros, mujeres y perros muertos de hambre tienen un repunte en el estilo que están plasmados: rayas de tinta sobre fondos blancos, o colores apagados que refuerzan el vacío de la ciudad, mientras que los colores vivos son utilizados para plasmar los interiores de bares y la vida de las fiestas.

“A mí lo que me gusta es que a pesar de que los temas que utiliza Geroca son cíclicos y repetitivos, siento que cada serie que ofrece, da también una nueva visión y se reinventa a partir de sí mismo. En la cual busca una nueva forma de ver lo que ya ha visto.

“Estas obras que muchas veces me han dicho que parecen pinturas hechas por niños, son lo que yo acercaría al “art-brut”, las cuales tienen un gran trabajo detrás para que, precisamente se vean así, pues Geroca es arquitecto y aún detrás de todas esas líneas y rayas, se ve la perspectiva del ojo entrenado que tiene en cuanto a manejo de colores, de luz, de perspectivas y sobre todo el caos”, dijo.

EL CERDO Y EL PINTOR

La obra del artista saltillense no puede desligarse de su galería predilecta de esta ciudad: El Cerdo de Babel. Castillo cuenta el por qué Geroca es un pilar dentro de la labor de promoción artística con la que cuenta el bar.

“Creo que el Cerdo no se puede entender sin la obra de Geroca, su presencia formó este deseo de una galería informal dentro de nuestras paredes. Creo que su obra vino a nosotros (El Cerdo de Babel) a darnos una fortaleza, en esta parte en la cual no habíamos pensado.

“Debido a la presentación de su obra nosotros hemos tenido que ser más críticos en cuanto a la obra que se expone dentro del Cerdo, así como nos ha forzado a adquirir conocimientos para dar un apoyo a los artistas emergentes que han llegado a pedirnos el espacio”, dijo.

La exposición Geroca. Retrospectiva 1978-2006 estará en la Taberna El Cerdo de Babel hasta el 15 de agosto, en un horario de 17:00 a 2:00 horas, con la entrada libre de lunes a sábado.