Nueva York, EU.- Irán subirá este miércoles al estrado en la 71ª Asamblea General de la ONU, para defender un acuerdo sobre su política nuclear que se ha convertido en uno de los temas centrales de la cumbre diplomática.

El presidente de Irán, Hasan Rohani, se dirigirá a la comunidad internacional desde el mismo estrado donde el martes se lanzaron fuertes ataques contra el acuerdo firmado por seis países con el Gobierno de Teherán en 2015.

En una Asamblea General reunida bajo la sombra de un conflicto atómico con Corea del Norte, la supervivencia del acuerdo nuclear con Irán se convirtió en el centro de una tempestad diplomática.

Bajo ese acuerdo, Teherán suspendió parte de su programa de enriquecimiento de uranio, desmanteló algunos reactores y abrió instalaciones a la inspección de la ONU. En contrapartida, Estados Unidos y la Unión Europea levantaron sanciones al país.

Después del discurso de Rohani, el ministro de Exteriores de Irán, Mohamed Zarif, se reunirá por primera vez con el secretario estadounidense de Estado, Rex Tillerson.

Irán y el acuerdo de 2015 fueron blanco el martes de ataques virulentos por parte del presidente estadounidense, Donald Trump, y del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu.

En un discurso de tono belicista, Trump dijo que Irán era un “estado paria” conducido por una “dictadura corrupta” que genera inestabilidad en todo Oriente Medio.

Pesadas críticas

Con relación al acuerdo sobre política nuclear, Trump dijo que era uno de los peores jamás firmados por la Casa Blanca. “Francamente, creo que es una vergüenza”, dijo el mandatario.

Trump estaba también enviando un mensaje interno, ya que su gobierno tiene hasta el 15 de octubre para informar al Congreso si cree que Teherán cumple con sus obligaciones estipuladas en el acuerdo. Instantes después de ese discurso, el propio ministro Zarif dijo que las declaraciones de Trump “no merecían respuesta”.

Por su parte, Netanyahu enfatizó que Irán -que también mantiene una tensa relación con los Estados árabes de mayoría suní- es una amenaza para Israel.

Según el primer ministro israelí, Irán “es como un tigre hambriento, que no se suma a la comunidad de naciones sino que devora naciones”, después de la firma de ese acuerdo.

En defensa del acuerdo

Sin embargo, Francia, uno de los cinco países firmantes del pacto con Irán, defendió la continuidad del acuerdo.

El mandatario francés, Emmanuel Macron, dijo en la ONU que denunciar ese acuerdo sería un “grave error”, pues es un mecanismo eficiente para controlar la política nuclear iraní.

“Seamos más estrictos, pero no abandonemos acuerdos que han generado seguridad”, dijo.

Los otros países firmantes (Alemania, Reino Unido, China y Rusia) aún no han hecho uso de la palabra en esta Asamblea General y se espera que aborden la cuestión en sus participaciones.

Si EU decide finalmente denunciar el acuerdo de 2015 con Irán, habrá que ver cómo la Casa Blanca convence a sus aliados de la solidez de una eventual negociación con Corea del Norte.

¿Venezuela en la agenda?

En el ámbito latinoamericano, la crisis de Venezuela podrá volver al tapete tras ser uno de los temas de los discursos del martes en la ONU.

En efecto, los representantes de Paraguay, Panamá y Argentina, todos fuertes críticos del Gobierno de Caracas, subirán el estrado este miércoles.

El presidente panameño, Juan Carlos Varela, y la vicepresidenta de Argentina, Gabriela Michetti, participaron el lunes en una cena con Trump en la que el mandatario estadounidense les pidió aumentar la presión diplomática sobre Caracas.

Asimismo, en su discurso del martes, Trump dijo que la “dictadura socialista” de Venezuela es “inaceptable” y aseguró que ayudará al pueblo venezolano a restaurar la democracia.

Este miércoles también pronunciará un discurso el nuevo presidente de Ecuador, Lenin Moreno, que busca reacomodar la política exterior de su antecesor, Rafael Correa (2007-2017), quien fue un importante aliado del fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez (1999-2013) y su delfín, Nicolás Maduro.