Washington.- Negociadores nucleares de Estados Unidos y Corea del Sur prometieron hoy mantener su campaña conjunta de “presión” contra Norcorea para llevarla a aceptar negociaciones sobre su programa nuclear.

El representante especial de Corea del Sur para los asuntos de paz y seguridad de la península coreana, Lee Do-hoon, se reunió este viernes con su homólogo estadunidense, Joseph Yun, en la isla vacacional de Jeju, en el sur del país, para examinar el estancamiento nuclear norcoreano y sus amenazas.

“No hay duda de que Corea del Sur y Estados Unidos desean encontrar una forma pacífica para resolver la cuestión nuclear norcoreana, por lo que dialogamos y acordamos que la campaña de presión debe ser un elemento clave”, reveló Yun en declaraciones a la prensa local e internacional, tras la reunión.

El negociador estadunidense dijo que la política conjunta entre Seúl y Washington contra Pyongyang tiene como fin lograr su desnuclearización y obtener el apoyo mundial para presionar al régimen a que se comprometa a mantener un diálogo “significativo” y “creíble”, según un reporte de la agencia informativa Yonhap.

Yun destacó que Corea del Sur y su país han cooperado con otros países como China, Rusia, Japón, e incluso la Unión Europea (UE) para presionar a Corea del Norte a mantener un diálogo significativo y creíble que puedan tomar pasos hacia su desnuclearización.

Ante la pregunta sobre la visita de este viernes de Song Tao, jefe del departamento internacional del Comité Central del Partido Comunista de China a Corea del Norte, Yun dijo que China tiene, por supuesto, un gran papel que jugar en las cuestiones de seguridad regional y expresó su deseo de que la visita ayude al avance del objetivo para alcanzar la desnuclearización.

China anunció el pasado miércoles, de manera sorpresiva, el viaje de su enviado especial a Corea del Norte a fin de informar sobre los resultados del 19 Congreso del Partido Comunista Chino (PCCh), celebrado el mes pasado, debido a sus tensas relaciones con Pyongyang por sus pruebas nucleares y de misiles.

El negociador surcoreano, por su parte, también destacó la importancia de que China mande a su enviado especial a Pyongyang, Song Tao, teniendo en cuenta la situación actual, y añadió que Corea del Sur está observando de cerca los resultados de la visita del enviado del presidente chino, Xi Jinping.

Ambos funcionarios parecieron no dar mucho significado al paréntesis de casi dos meses desde que Corea del Norte llevó a cabo su última provocación y se limitaron a decir que “no han podido confirmar la verdadera intención de Pyongyang”.

Yun dijo que espera que las provocaciones norcoreanas se detengan por completo y reveló que no han mantenido comunicación con Corea del Norte, por lo que no puede interpretar el “paréntesis”, ni de forma positiva ni negativa.

Tras su llegada a Corea del Sur, el pasado martes, Yun dijo a los periodistas que desconoce el motivo por el que el Norte detuvo sus provocaciones, pero instó a Pyongyang a mantenerse “libre de provocaciones” por un tiempo, añadiendo que sería un “buen comienzo”.

Corea del Norte no ha llevado a cabo ningún acto provocativo desde el 15 de septiembre pasado, cuando disparó un misil con dirección al mar del este.

La reunión entre los negociadores nucleares de Estados Unidos y Corea del Sur, tuvo lugar después de la cumbre entre el presidente surcoreano, Moon Jae-in, y su homólogo estadunidense, Donald Trump, realizada la semana pasada en Seúl.