Washington, EU.- Estados Unidos y una coalición de varios países quieren mantener su presencia militar en Irak después de la eventual derrota del grupo Estado Islámico (EI), dijo el martes un alto mando del Ejército estadounidense.

El teniente general Stephen Townsend explicó que el gobierno de Irak ha expresado interés en que Estados Unidos y la coalición permanezcan en el país.

“Nuestro gobierno está igualmente interesado en eso, como varios gobiernos de la coalición que han expresado un interés en unirse en ese esfuerzo”, dijo Townsend desde Bagdad a través de una videollamada.

Townsend añadió que las negociaciones ya han entrado en la fase final para tomar una decisión.

“Yo anticiparía que habrá una presencia de la coalición aquí después de la derrota de ISIS”, dijo utilizando el acrónimo del grupo EI.

Después de que el expresidente estadounidense Barack Obama completara la retirada de las tropas de Irak en 2011, las fuerzas de seguridad iraquíes se debilitaron rápidamente bajo el mando del entonces primer ministro Nuri Al Maliki.

Cuando el EI atacó en 2014, los militares fueron incapaces de hacer una defensa. Muchas unidades dieron la vuelta y huyeron, perdiendo armamentos y vehículos de valor.

“Todos podemos ver lo que pasó a fines de 2011, cuando Estados Unidos y la coalición se fueron de Irak la última vez, y ver cómo se desarrollaron los tres años intermedios. No creo que queramos repetir eso”, dijo Townsend.

Las autoridades iraquíes están de júbilo tras declarar que sus fuerzas de seguridad expulsaron al EI de su antiguo bastión de Mosul.

Pero la celebración es empañada por el hecho de que la lucha continuará en otra parte.

“Todavía hay reductos de resistencia en Mosul, escondites y bombas escondidas que tomará semanas en despejar, así como enclaves de ISIS en Hawijah y al oeste de Anbar”, dijo Townsend.

Actualmente hay más de 5.000 militares de Estados Unidos en Irak, muchos de ellos asesores de los servicios de seguridad iraquíes.

Townsend dijo que espera que la presencia militar sea menor en el futuro y que las tropas se alojarán en las bases estadounidenses ya existentes.