Saltillo, Coah- A la lista de crímenes contra sacerdotes en México se suma un caso más, el del padre Joaquín Hernández Sifuentes, cuyo cuerpo fue encontrado el jueves 12 de enero, cinco días después de que lo declararon desaparecido.

La inseguridad y vulnerabilidad en la que viven los miembros del clero en México propicia este tipo de delitos. Según el Centro Católico Multimedia (CCM), de 1990 a 2016 llevaban contabilizados 55 crímenes contra sacerdotes en México, contando los dos de Veracruz el año pasado.

Según el informe del CCM, el modus operandi va desde el secuestro y la tortura en 44% de los casos, el robo en 35%, la agresión en vía pública 15% y de causa desconocida un 6 por ciento.

A esas estadísticas se suma el padre Joaquín Hernández, el número 56 en la lista del CMM, quien se desempeñó el último año como vicario de la parroquia Sagrado Corazón, en La Aurora, cuyo párroco es el padre Rodolfo Pachicano Llaca.

No se tiene antecedente de un caso como este en Coahuila. Su muerte de forma violenta conmocionó a la grey católica local. El tema llegó hasta el Episcopado Mexicano que exige a las autoridades se haga justicia.

La desaparición y luego el hallazgo del cuerpo del sacerdote estuvieron envueltos en un halo de misterio, cuya secrecía compartieron en primeros momentos sólo la Procuraduría de Coahuila y la Diócesis de Saltillo.

El cuerpo del padre Joaquín hoy será enterrado, con una velación previa en el Seminario de Saltillo. Su cuerpo ya descansa en paz. Ojalá que se esclarezcan los hechos y apresen a quien lo asesinó. Ojalá no sea una estadística más en los archivos de la impunidad.