SDP | Ciudad de México.- Para poder cumplir el “sueño americano” y dar una mejor calidad de vida a sus hijos, Luis Enrique viajó más de 1,328 kilómetros desde su casa en Aguascalientes a El Paso, Texas en Estados Unidos.

Pese a su lucha y recorrer la mitad del país, el joven de 25 años formó parte esta semana, de los más de 170 repatriados que arribaron a Ciudad Juárez provenientes de Texas.

La historia de Luis Enrique García, originario de Aguascalientes, inició cuando trató de cruzar uno de los puentes internacionales de la frontera sin una visa, pues brincó las vallas y fue alcanzado por agentes de la patrulla fronteriza.

Luis fue remitido al condado de Texas y ahí permaneció durante dos semanas hasta que este fin de semana lo deportaron y fue canalizado al gobierno municipal de Ciudad Juárez para que regresara a su lugar de origen.

Durante la última semana, la historia de Luis se ha repetido en diferentes ocasiones en el municipio de Juárez, reporta la Dirección de Derechos Humanos, quienes han atenido en lo que va del mes, a más de 170 repatriados que son canalizados al gobierno para que los apoyen a volver a sus lugares de origen.

El titular de Derechos Humanos municipal, Rogelio Alejandro Pinal Castellanos, informó que desde el pasado miércoles y hasta el viernes por la tarde, repuntó la cantidad de personas que fueron deportadas de Estados Unidos a México, y remitidas a la dependencia.

Tan sólo el viernes, se dio atención a 50 migrantes, cuando en otro momento se atendía a un promedio de 30 personas por semana.

“Nos está incrementando estos días, esperamos que vaya a la baja, que no haya tantas personas deportadas”, indicó el funcionario.

Debido a la cercanía con la frontera el municipio de Ciudad Juárez brinda atención a las personas repatriadas a través del pasaje gratuito a sus lugares de origen, además les ofrece agua, un kit de alimentos y otro de limpieza.

La mayoría de los repatriados en los últimos días son originarios del estado de Chihuahua, además de Chiapas, Veracruz, Puebla, Zacatecas, Aguascalientes y Guerrero.

“Nosotros les damos transporte, nos aseguramos de que lleguen, que no se queden varados”, dijo.

En noviembre pasado, la dirección de Derechos Humanos tuvo un repunte considerable, pese a que la cifra bajó durante 2017, pues de enero a la fecha se recibieron a 600 migrantes, en julio se volvieron a incrementarse las atenciones a 170, de los cuales nueve son mujeres.

Pinal Castellanos dijo que por cada 20 repatriados que llegan al municipio, tres indican que se quedarán en la ciudad, es decir, no aceptan el boleto de transporte a sus lugares de origen, personas que son enviadasa la Casa del Migrante.

La dependencia cuenta actualmente con 5 millones 800 mil pesos para atender a los repatriados durante 2017.