Saltillo, Coahuila.- Golpes, quemaduras, fracturas, mutilaciones, agresión sexual, desnutrición y lesiones que llevan al coma y a la muerte, son los casos que este año ha registrado la Procuraduría de Niñas, Niños y la Familia.

En lo que va del 2017, en la Región Sureste, de 3 mil 937 menores, casi siete de cada 100 vivieron violencia física, uno de cada tres violencia emocional, la mitad omisión de cuidados, casi cinco de 100 violencia sexual y, en promedio, una muerte al año.

La procuradora para Niños, Niñas y la Familia, Yezka Garza Ramírez, dijo que incluso este año se reportó desde Ciudad Acuña el caso de un niño de 2 años con muerte cerebral: “tenía marcas en todo el cuerpo, añejas y recientes; sufría desnutrición; su cuerpo fue abandonado en el Seguro Social por su padrastro”.

Maltrato infantil, un grito en silencio

El maltrato infantil es una problemática que no se puede ni se debe obviar en Coahuila.

Cualquier clase de lesión física o emocional hacia un infante, por simple que esta sea, debe de castigarse con todo el rigor.

Respecto al caso en Ciudad Acuña, donde fue abandonado en el hospital un pequeño como severas heridas y un avanzado estado de desnutrición, sin duda causa todo el enojo de la sociedad.

El padrastro quiso darse a la fuga, pero se activó una movilización por parte de la Policía de la Pronnif y se logró capturar. En este caso, como en muchos otros, una vecina dijo haber escuchado el llanto frecuente del niño, pero no denunció porque no quería problemas; al enterarse de los hechos, dijo que toda su vida se arrepentiría.

La omisión de cuidados, de las más recurrentes en la entidad, es la negligencia por parte de los padres para registrarlo al nacer, no asearlo, deserción escolar, falta de vacunas, inadecuada alimentación, desnutrición y abandono.

El maltrato sicológico, físico y sexual se da en meno medida pero resultan ser, los más delesnabales en perjuicio del desarrollo integral del menor.

Yezka Garza Ramírez, titular de la Pronnif, aseguró que para detectar a los menores que sufren maltrato infantil se trabaja de manera conjunta con la escuela y los hospitales, dependencias que tienen la obligación de reportar cualquier situación anómala que involucre al menor.

“En muchos de los casos que recibimos, sobre todo de métodos inadecuados de corrección, los padres están en la idea de que son sus hijos y los pueden corregir de la manera que ellos decidan, a pesar de poner en riesgo su integridad”.

“La violencia se presenta, en gran medida, por las madres, porque son quienes están el mayor tiempo al cuidado de los hijos; también por los padrastros, por ello es importe que se recapacite si la nueva pareja es la mejor opción”, señaló.