Saltillo, Coahuila.- La entrega de concesiones para taxis dejó mal sabor de boca en los ciudadanos que creyeron en que se trataría de como lo dijo el Gobierno Municipal, “la licitación más transparente de la historia”.

Ayer, Laura Isela Juárez Sánchez, una ciudadana que adquirió un KIA 2018 para inscribirse en el concurso de licitaciones de taxis denunció “corrupción” por parte de las autoridades municipales que fueron responsables del proceso.

Laura Isela concursó para una concesión genérica, entregó todos los requisitos y se endeudó para adquirir su vehículo, estaba ilusionada porque su esposo tendría por fin una fuente fija de trabajo, sin embargo, le negaron la solicitud a pesar de cumplir todos los requisitos y prefirieron entregar las concesiones para automóviles de modelos menos modernos que no cambiarán en nada la imagen de la ciudad, uno de los objetivos del proyecto emprendido por el alcalde, Isidro López Villarreal.

“La asignación de concesiones fueron asignadas de manera ventajosa, desordenada, fraudulenta y bastante deshonesta por parte de la Comisión de Movilidad y Transporte del Ayuntamiento, como lo predijeron los regidores Luis Fernando Aguirre, Alfredo Martínez y Tomy Vives”, comentó Laura Isela.

Al estar dentro del concurso por una concesión y visitar en repetidas ocasiones las dependencias encargadas de la asignación, Laura Isela y su esposo se percataron de la corrupción que envolvió el proceso, “la autoridad le dio preferencia a los sindicatos aunque estos tenían automóviles menos modernos, eso no les importó, su prioridad no fue modernizar el sistema de transporte de la ciudad sino hacer negocio”, comenta la inconforme.

“Como forma de consolación, las autoridades nos dieron una concesión -de las 150- asignadas a la línea rosa, pero no sirve porque no hay mujeres que quieran manejar el vehículo, haz de cuenta que nos dijeron: ‘puede ver la tele pero no prenderla’”, comenta Laura Isela, quien padece una discapacidad y no puede conducir el vehículo.

“No sólo fue corrupto el proceso sino que las autoridades que estaban supuestamente interesadas en solucionar los problemas de transporte y movilidad de Saltillo, no dan la cara”.