Parras de la Fuente.- La impotencia y el coraje inundaron a Ana Patricia Bernal al sentirse desprotegida por las autoridades educativas y ministeriales al tratar el caso de su hijo de 6 años, quien es alumno del Jardín de Niños Amalia Ramos y que sufrió múltiples heridas en la boca tras sufrir una supuesta caída.

Durante su búsqueda de apoyo, pues su hijo necesitaba una cirugía que costaría aproximadamente 15 mil pesos, hasta el dentista del Municipio trató de intimidarla y amagó con retirarle el Seguro Popular si continuaba haciendo “escándalo”.

A pesar de ser madre soltera y de escasos recursos, Ana Patricia volcó su frustración en fuerza y comenzó la lucha para llamar la atención de las autoridades, por lo que realizó un video relatando la odisea de su pequeño, quien presentaba paladar suelto, tres dientes caídos, otro fracturado y una herida de considerables dimensiones en la boca.

Pasaron más de 48 horas para que las autoridades la apoyaran, a tal grado de que la Policía Investigadora acudió hasta su puerta para llevarla al Ministerio Público, además de que la Secretaría de Educación envió un abogado para iniciar las investigaciones.

A tres días del incidente el menor ya presenta mejoría y fue atendido por diversas instancias gubernamentales, además de que se descartó que necesite cirugía. Sin embargo, la madre aseguró que continuará con el proceso en busca de justicia.

‘FUE DESCUIDO Y NEGLIGENCIA DE LA ESCUELA’

Indignada por la situación, Ana Patricia decidió exponer el caso a través de las redes sociales buscando ayuda para su hijo. El menor presenta puntos por dentro y fuera de la boca y le fue recomendando un cubrebocas para evitar infecciones.

“Ese día la directora tenía a los papás en un salón contando unas latas, los niños estaban sin vigilancia en el patio, mi hijo me dice que lo aventaron los compañeros que siempre lo molestan y se pegó con el resbaladero”, cuenta la madre.

Al ver que las puertas se le cerraron, decidió exponer su caso en las redes sociales. A las pocas horas, las autoridades educativas reaccionaron y la mañana del jueves pasado acudieron a investigar.

La mamá asegura que afortunadamente ya le brindaron ayuda para tratar médicamente al niño, sin embargo, dijo que continuará el proceso hasta que se deslinden responsabilidades, pues no se puede jugar con la vida y la seguridad de los menores.

#LADYPROTOCOLO

Por su parte, la directora del Jardín de Niños Amalia Ramos, Verónica Carrillo Ramos, descartó que se haya presentando negligencia en el caso del menor accidentado y aseguró que ella siguió el protocolo que marca la Secretaría de Educación, por lo que dio aviso a su autoridad superior.

Al cuestionarle el porqué no se trasladó al menor a un hospital para recibir atención médica, puntualizó que no pueden hacer eso porque existe un “protocolo” que se tiene que seguir.

Al continuar cuestionando sobre el incidente, la directora insistió en que se siguió un “protocolo” que le marcó el subsecretario de Educación, Julián Montoya.

-¿Qué le sucedió al niño?

“No estoy autorizada a dar tanta información porque todo lleva un procedimiento. Yo hago un acta y se la paso a supervisión, y ellos a su vez al ‘Nivel’, todo esto es una cadena que debemos respetar”.

-Ante las acusaciones de la madre que no le avisaron, ¿qué nos puede decir?

“Todo se está atendiendo de acuerdo con el protocolo que nos menciona nuestro profesor Julián Montoya. Se hizo el protocolo de emergencia”.

-¿Por qué no trasladaron al menor?

“Te comento que se hizo en protocolo tal cual nos menciona la Secretaría; nosotros contamos con el respaldo del protocolo, se le habló a la madre y a
emergencias”.

-De los cuerpos de emergencia, ¿quién brindó el apoyo?

“Ya está estipulado en el acta”.

-¿Cuánto tiempo llevó el protocolo?

“No fueron ni 10 minutos”.

-¿Quién vino de emergencias?

“Te vuelvo a mencionar, las cosas que se hicieron en el plantel se tienen que respetar, todo se atiende según el protocolo”.

Así concluyó la directora la entrevista, al tiempo que aseguró que tiene cinco meses como encargada del plantel y es el primer suceso de esta naturaleza que enfrenta.

ESCUELAS DE MALA CALIDAD

Habitantes de Parras coincidieron en señalar que los planteles educativos en este municipio dejan mucho qué desear, tanto en lo académico como en seguridad.

Explicaron que las maestras son, en su mayoría, jóvenes recién colocadas que no cuentan con la preparación adecuada para tratar a los menores, lo que da paso a que constantemente se presenten problemas en los planteles.

Incluso, un padre de familia que prefirió omitir sus datos dijo que su hija, cada que llegaba a la escuela, se orinaba por el temor que le tenía a la maestra.

“Son ‘huerquillas’ que no saben cómo tratar a los niños, y como no hay supervisión ni autoridades que les llamen la atención, hacen lo que quieren”, dijo indignado.