Ciudad de México.– Ana Crisol, una joven de 25 años con domicilio en el ejido Las Tijeras, de Centla, Tabasco, desapareció desde el pasado sábado 14 de octubre cuando salió con su novio de paseo; su pareja era un tipo celoso revelaron conocidos.

Ayer, el cuerpo de Ana fue localizado en el poblado Arroyo Polo 1era. Sección de Centla, flotado en las aguas del río Grijalva, descompuesto y semi devorado por las aves carroñeras.

La víctima aún conservaba el vestido con el que salió a encontrarse con su enamorado: una blusa con listones negros y azules.

El cadáver fue recuperado por Marinos de la Armada de México, destacamento Frontera, que utilizaron una lancha. Lo trasladaron a las instalaciones del 11vo. Batallón de Infantería de la Marina, en tanto que se esperaba el arribo de peritos de la Fiscalía de Tabasco adscrito a esa zona.

Ha trascendido que la Fiscalía de Tabasco busca al novio de Ana Crisol, que también desapareció desde el día que se extravío su pareja, y a quien responsabiliza del crimen, según revela el portal de Internet del diario Tabasco Hoy.

TANIA FUE DEGOLLADA POR SU NOVIO

Apenas el pasado 9 de octubre, otro feminicidio conmocionó a Tabasco. Tania de apenas 20 años de edad y que estudiaba el cuarto semestre de la carrera de Ingeniería Ambiental de la Universidad Tecnológica de Tabasco (UTT), salió a verse con su novio y desapareció; dos días después la encontraron dentro de una bolsa, degollada y con ataque sexual.

Luego de dos días de búsqueda, la joven Tania Santos, que había salido a verse en una plaza comercial en Villahermosa con su novio, apareció muerta: su cuerpo estaba tirado en un predio de la colonia La Manga II, dentro de una bolsa, con huellas de violación sexual, degollada y con cuatro cuchilladas.

El novio fue detenido por agentes de la Fiscalía de Tabasco y está confeso.

Al respecto el Fiscal Fernando Valenzuela Pernas explicó que este tipo de crímenes tan atroces se da en Tabasco por la descomposición social y los hogares disfuncionales donde priva la violencia.

“Este es un problema social que está ocurriendo y que pareciera que es parte del paisaje tabasqueño. Eso no puede seguir, hay que fomentar los valores familiares, ya que la mayoría de las veces la violencia familiar concluye en un feminicidio, debido a que la mujer no denuncia por miedo o por el chantaje que le hace su pareja con la cuestión económica y la agresión física”, expuso el funcionario.