Piedras Negras, Coah.- Nuevamente el sacerdote Juan Manuel Riojas Martínez está solo, su abogado dejó el caso y al parecer le queda como último recurso la defensoría de oficio, luego de que Santos Vázquez Estrada, el ex delegado de la procuraduría, abandonó el caso al no llegar a un acuerdo con los familiares de su cliente.

“Lamentablemente no hubo un acuerdo con la familia, pues inicialmente nos contrataron para analizar el caso, revisamos el expediente y luego de que ya les explicamos cuál era el panorama y cuáles serían los costos de ello, no se llegó a un acuerdo”, afirmó el abogado con maestría en juicios orales.

Riojas Martínez, mejor conocido como el padre Meño, fue denunciado por el seminarista Javier Calzada el pasado 24 de marzo (justo el día que la diócesis festejaba 14 años de haber sido formada) debido a que fue víctima de abuso sexual en varias ocasiones por parte del entonces rector del Seminario de Piedras Negras.

Semanas después también el ex seminarista Ignacio Martínez presentó una segunda denuncia por el mismo delito contra el sacerdote.

El padre Meño es considerado actualmente prófugo, ya que existe una orden de aprehensión emitida por un juez penal y en tanto no sea capturado su juicio no puede iniciar.

Tanto Calzada como Ignacio Martínez también presentaron denuncias en contra del obispo.